viernes, 2 de mayo de 2008

Son las diez

Esa sensación de llegar a casa después de ver una película sonriendo, y sacar al perro a las horas que más detestas sonriendo y alargando el paseo hasta más de quince minutos (todo un logro), esa sensación de levantarte con la sonrisa puesta que parezca que no puedes cambiar, esa sensación de decir, ala, no puede ser verdad, y esa sensación que te da cuando te dice cada dos por tres, sí, sí es verdad, esa sensación de estar hablando de todo con una conversación espectacular.

Esa sensación es la que deseo a todos a los que aprecio.



No me gusta esta actualización, pero echando un vistazo seguro que encuentro algo genial.

5 comentarios:

La chica de los mil colores dijo...

Yo esa sensacion la tengo, y la quiero tooodos los dias.
y esas grandes conversaciones...que nunca falten.
que me estas empezando a dar asco :)

Anónimo dijo...

no se si seguir la broma o provocarla

Anónimo dijo...

siempre se agradece el interes de una admiradora apasionada y secreta.

los sentimientos resultan tan imprevisibles!!!!!!!!

Álex dijo...

más que un admirado, últimamente me creo un detective de todo lo que tengo que investigar

fer dijo...

entre la filosofia y el movimiento detestivesco, querido alex, veo que esto se convertira en un gran embrollo.

asquitos y delitos.